PABLO IGLESIAS CON SU DISCURSO EN EL PARLAMENTO EUROPEO, MUEVE SUS CIMIENTOS.
Es un honor dirigirme a ustedes para presentar mi candidatura a la presidencia de esta cámara. Este parlamento está llamado a representar la soberanía de Europa y debemos, señorías, estar a la altura de lo que ello significa hoy. El sueño de Europa ha sido sepultado muchas veces pero siempre consiguió despertar de nuevo. Así sucedió hace casi 70 años: Europa volvió a despertar en la resistencia de sus pueblos contra el fascismo, en los supervivientes de los campos de exterminio, en quienes dieron su vida por la justicia y la libertad. Millares de compatriotas míos, que habían luchado defendiendo la democracia en España, participaron en esa lucha y en ese sueño de justicia. No se imaginan el orgullo que me produce como español que los primeros tanques que entraron a liberar Paris fueran guiados por combatientes españoles. Hoy, cuando la intolerancia y la xenofobia vuelven a amenazarnos, quiero reivindicar la memoria europea del antifascismo y la de todos los pueblo