27 DE ENERO, DÍA DE LA MEMORIA DEL HOLOCAUSTO
* No queremos olvidar el horror fascista, pero tampoco
queremos olvidar el amor entre los nazis y las judías, lo que demuestra que
todos somos iguales.
** Guardias nazis se enamoraban de bellas mujeres judías que
iban a ser asesinadas, un ejemplo es la historia de Helena y Franz. Ella, una
judía que llegó a Auschwitz en 1942. Él, un guardia de las SS llamado Franz
Wunsch.
*** Hitler ordenó encarcelar a los guardias que se
enamoraban de las judías, y él se enamoró de Eva Braun de ascendencia judía. Se
confirma que Hitler tenía un solo testículo, será por eso que huyo del Ejército
Rojo, le faltó Huevos.
27/01/2017
Cada 27 de enero se celebra el Día de la Memoria del
Holocausto. Una día para recordar a aquellos que sufrieron el horror del
nazismo y mantener viva su memoria. Los campos de concentración fueron el mayor
infierno terrenal de aquel régimen y solo algunos lograron sobrevivir. Se les
arrebató absolutamente todo, pero jamás perdieron la capacidad ni de sentir, ni
de amar.
De eso trata el libro
Amor y horror nazi. Historias reales en los campos de concentración
(Luciérnaga), de Mónica González Álvarez, en el que se recogen siete historias
reales (14 testimonios) de relaciones que surgieron en los campos de
concentración nazis.
"Yo pensaba que no existía el amor en un campo de
concentración", ha afirmado González al inicio de la conversación que ha
mantenido con Carles Francino. Pero sí, sí existió. Un ejemplo es la historia
de Helena y Franz. Ella, una judía que llegó a Auschwitz en 1942. Él, un
guardia de las SS llamado Franz Wunsch.
"Helena se había colado en un barracón en el que se
vivía mejor. La iban a mandar a la cámara de gas, pero apareció Franz, uno de
los oficiales más temidos de Auschwitz, y alguien le dijo a Helena que le
cantara el cumpleaños feliz", ha contado Mónica, antes de añadir:
"Franz escuchó a Helena y se enamoró".
LA NATURALEZA CONTRA HITLER
Hitler ordenó que se encarcelaran a los militares que se
enamoraban de las judías, sin saber que el se había enamorado de Eva Braun de
ascendencia judía, que por cierto era media tonta, quería ser como Yenz, la
mujer de Tarzan y se enamoró de un fascista impotente, HITLER.
Un informe médico del
dictador Adolf Hitler datado en 1923 ha confirmado en parte una de las leyendas
sobre su persona, al reseñar que padecía criptorquidia, es decir, que sólo uno
de sus testículos había descendido al escroto. El acta fue firmada por el doctor
Josef Brinsteiner en la prisión de Baviera donde Hitler fue recluido tras el
fallido golpe de estado que protagonizó en Múnich en 1923, y forma parte del
libro 'Hitler como prisionero en Landsberg am Lech, 1923/24' que acaba de
publicar en Alemania el historiador Peter Fleischmann. Este mismo médico
también confirmó que los abuelos de Hitler eran judíos banqueros millonarios y
que fueron los que le financiaron para ascender en la política, sin saber que
sería el flagelo de la raza judía.
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